Embotelladoras para vino

La misión principal de las embotelladoras es introducir el mosto o vino en el interior de las botellas, alcanzando un nivel adecuado en función de la capacidad nominal y temperatura de las mismas, Así como también garantizar las condiciones de estabilización de los vinos embotellados. Las embotelladoras pueden ser de varios tipos, pueden ser de accionamiento manual en instalaciones muy antiguas, con un rendimiento de unas 600 botellas por hora. En la actualizad se utilizan las embotelladoras semiautomáticas, que ofrecen un rendimiento de entre 800 a 1400 botellas por hora, o bien embotelladoras automáticas, que ofrecen un rendimiento superior a las antes ya mencionadas, llegando a producir desde 1.800 hasta decenas de miles de botellas por hora.

Todas las embotelladoras se componen de un depósito acumulador del líquido a embotellar, que normalmente se encuentra situado en la parte superior de la embotelladora, donde por acción de la gravedad o por presión en el depósito, o por vacío en la botella, el liquido es empujado hacia los elementos de llenado.

Llenadoras volumétricas: 

Estas embotelladoras funcionan de manera muy sencilla, ya que introducen un volumen de líquido predeterminado en todas las botellas, con un margen de error mínimo (de 2 a 5 botellas por 1.000 botellas). Lo que quiere decir que el sistema de llenado es muy preciso en las embotelladoras volumétricas. El problema lo tienen las botellas ya que aunque provengan de la misma fábrica y de la misma partida de fabricación, nunca contienen el mismo volumen.

Llenadoras de nivel constante:
Estas máquinas resuelven el problema de las llenadoras volumétricas, permitiendo una perfecta nivelación del líquido embotellado, aún cuando el volumen de las botellas no sea exactamente el mismo. Dentro de éstas se agrupan en los siguientes tipos: sifonado, isobarométricas, y presión diferencial.

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